Y has decidido tentar mi mente, has decidido venir a mi para escuchar lo que pienso de ti, vienes nerviosa por todo lo que puedes saber en este momento, pero me encanta tu osadía y por ello voy a complacerte por esta vez, pues es un placer romper el silencio para que entiendas lo que mi mente guarda para ti, pero desde un lado no tan caballeroso ni con moral, por el contrario, le has preguntado a aquel que se deleita con la lujuria y el placer de un cuerpo libre de prejuicios.
Si has llegado hasta este punto es porque aunque entiendes que puedo tocar fibras sensibles de tus principios, deseas profundamente que sea honesto, sincero y que endulce tus oídos con vehemencia, pero no con sutilezas, no con mentiras, quieres saber todo lo que puedes despertar en la mente de un hombre como yo, pues sientes que soy diferente a todos aquellos que te rodean, logro despertar en ti una atracción que no logras explicar, llamo tu atención, te invade la curiosidad, la intriga junto con deseo y pasión que escondes tras una mascara hermosa de mujer ejemplar.
Estoy seguro que ni tu misma sabes lo ardiente y apasionada que puedes ser, a ti misma te asustan tus fantasías pues crees que todo aquello que piensas no es del agrado de Dios y tus pensamientos obscenos son pecado y no es apto para oídos ni conocimiento de tanto santo, pues debajo de tanta amabilidad, seriedad y ternura se esconde una dama con pensamientos carnales por montones, pero sobre todo con ansias de experimentar aquellos placeres exquisitos pero profanos que aun desconoce.
Hermosa alegría, eres enérgica y siempre muy activa, pues debe ser delicioso hacerte el amor y tener sexo contigo, una mujer que exige, pero que complace y te excita con una sonrisa retándote a no rendirte y a querer hacer que te vengas una y otra vez. Sonrisa picara y maliciosa cuando te sientes en confianza, quieres provocar y tienes la capacidad de dañar y corromper la mente de los hombres, es fácil tener erecciones continuas cada oportunidad en que me acerco a ti.
Quiero ser atrevido en pensar que me has deseado y me has idealizado, que en tu mente he tenido espacios donde te guardas el pudor y la ética de mujer intachable que quiere la sociedad, para ser una mujer libre y aquella que muestra toda tu pasión, que en su mente aumentan los antojos de mi cuerpo, de mis manos, de mi lengua y sobre todo, aquellos anhelos de tener sexo salvaje, apasionado y pueda convertirla en mi juguete, en mi perra, has querido que te domine, ser sumisa y una excelente alumna.
¿Te has masturbado pensando en mi? ¿Cuántas veces?
Y si quedamos a solas ¿tendrías la capacidad de verme a los ojos fijamente sin que tu corazón se acelere? no lo creo, lo más probable es que comiences a evadirme la mirada, a jugar con tu pelo, mover tus piernas, tus manos no estarían quietas, querrás que te bese, pero también que te desnude en ese instante. ¿crees que exagero? Eso no lo sé ahora, para conocer la respuesta debería ver tu entrepierna o sentirlo en este instante, pero lo dejaremos a la "imaginación " momentáneamente.
Me complacería mucho hacerte humedecer en extremo, que tu vagina sea un manantial, de agua fresca y cristalina que deleite mi paladar sediento de ti, que tus tangas se empapen a tal punto que comiencen a gotear y sea evidente cuando aquellas gotas bajen lentamente por tus piernas ante mis ojos.
Verte a los ojos y decirte que son hermosos, pero en la verdad mi deseo es verlos fuera de orbita mientras tienes un orgasmo real y placentero. Me gusta como te vistes, se observa elegancia y porte, pero a la mierda esos trapos costosos, yo quiero romperlos, ver tu piel, tener eso que escondes con tanto recelo para los demás, pero que sin pensarlo me lo ofrecerías sin mayor resistencia .
Tu sonrisa... claro que me gusta y me gustaría que estuviera allí luego que lograras venirte y que que con tono de voz sensual y pequeños besos provocadores me pidas que lo hagamos de nuevo.
Quiero verte en la habitación vestida con una camisa mía, semi abotonada, pero que tus pechos sobresalgan un poco, acercarme a ti viéndote con deseo, rompiendo los botones con violencia, que te inclines ante mi y ruegues por que te permita introducir mi pene en tu boca.
Hermosas piernas te pido que te relajes y que ellas descansen en mis hombros mientras irrumpo en tu vagina como si fuera mi casa, mi morada, o tal ves si con ellas te inclinas un poco para retarme a que mi boca y mi lengua se pierdan en tus nalgas. Imagino la forma, textura, olor y sabor de tu clítoris espero me lo quieras enseñar y mostrar como lo acaricias imaginándome, queriendo que sea quien te garche cada noche al llegar del trabajo.
Me quedo viendo tu figura, observo cada detalle de tu cuerpo aunque tengas ropa de más, me detengo en tus senos y los imagino en mi boca y a ti masajeándolos, invitándome a ser participe de aquél acto. Quisiera tocarlos, morder tus pezones con cautela pero con ganas. Tu pelo, suelto, muy lindo en verdad, no se que shampoo usas, ni los tratamientos que compres, pues yo lo único que veo es que es perfecto para envolverlo en mi mano y halarlo, así es, me pone mal, me encabrona, porque está perfecto si penetrara ese culo hermoso, ese que no se atreven a tocarlo pero que incita a devorarlo.
Atractivos, elegantes y cultos, el prospecto de hombre que prefieres, pero no nos vamos a mentir, con quien de ellos te has sentido una verdadera golfa, quien ha logrado dañar tu mente y quitar tus temores y sentirte plena? Perdón... quizá nuevamente supongo, pero también supongo que no estoy equivocado, eres ardiente, eres pasión, eres un terremoto esperando una pequeña ola para sacudirse como si el maldito mundo fuera a acabarse.
Quieres hablar sucio en la cama, que te dominen, quieres probar cosas nuevas, quieres sentir placeres que aun desconoces pero los has escuchado de algún lado, tienes fantasías por cumplir porque muchos de los príncipes con los que has estado son muy básicos para entender lo que significa hacer el amor y complacer a una mujer, quieres entender por que es tan difícil encontrar a un hombre que se tome el trabajo de inventar y de usar su imaginación que pueda convertirse en tu Massimo o Christian Grey o por lo menos que indague acerca de tus anastasias. Eres una doncella pero anhelas transformarte por un momento en una cualquiera, que te deseen tanto que te sientas la mujer mas especial y hermosa del mundo, que te inspire a tener sexo tras sexo tras sexo y aunque comience a doler vas a querer más, porque lo mereces y porque lo necesitas, lo mereces.
Pues bien, esta pequeña y deliciosa confesión inmoral será nuestro secreto, espero no pierdas el paraíso por esto, pero recuerda... has sido tu quien ha venido a mi.
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